Educar para la paz, es educar para la prosperidad
Educar para la paz, es educar para la prosperidad. La prosperidad económica y la paz están interrelacionadas
Instituto para la Economía y la Paz IEP
La Educación para la Paz busca cultivar las competencias y actitudes que son necesarias para participar en acciones transformadoras para el cambio pacífico, mismas que conducirán a una mayor prosperidad social y económica. Siguiendo esta idea, podríamos concluir que trabajar en base a lo que propone el marco teórico que explica la “inteligencia emocional”, nos daría sustento para desarrollar una serie de estrategias basadas en el manejo de las emociones.
Según uno de los principales autores que ha escrito sobre la “inteligencia emocional” el reconocido Daniel Golleman, esta es la capacidad de reconocer sentimientos propios y ajenos, de motivarnos y de manejar adecuadamente las relaciones. ¿Para qué sirve? Principalmente, para sacar más partido de nuestra propia información emocional y de la de los demás porque la emoción es la expresión física de nuestra mente y nunca miente.
Las emociones nos informan de cómo procesamos lo que vivimos y esto es muy útil tanto en nuestra vida como en cualquier ámbito porque permite, por ejemplo, ser consciente de lo que decimos y cómo lo decimos. La inteligencia emocional es fundamental para construir y mantener relaciones e influir en los demás.
Participación ciudadana para la construcción de paz
De acuerdo al “Informe sobre el futuro del empleo 2023” publicado por el Foro Económico Mundial (WEF) entre las habilidades consideradas como centrales para los trabajadores en todos los sectores de la economía destacan:
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Pensamiento analítico
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Motivación y autoconciencia
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Resiliencia, flexibilidad y agilidad
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Empatía y escucha activa
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Liderazgo e influencia social
Estas habilidades cognitivas, sociales y emocionales, alineadas con la teoría que explica la “inteligencia emocional” también son promovidas como las más esenciales en las instituciones educativas más importantes a nivel mundial. Siguiendo este orden de ideas, resulta importante plantearnos cómo poner al centro una agenda sostenible, accesible y democrática para educar para la paz, así como para practicar y mejorar la inteligencia emocional y otras habilidades prosociales con el fin de aumentar la prosperidad y el bienestar individual y social.
Aprendizaje socioemocional en la niñez para la construcción de paz
Un tema transversal
La educación para la paz, debe ser abordada como un tema transversal que puede y debe ser aplicada en diferentes áreas y etapas del aprendizaje de las personas, diferenciando el origen de los problemas que serán abordados y aplicando el método adecuado que permita indagar en la realidad social desde los diversos contextos, de tal forma que se genere y estimule un interés por el conocimiento. De igual forma, la educación para la paz se puede convertir en una herramienta que facilite el crecimiento personal y social, al trazar el camino que lleve a mejorar en lo individual y en lo colectivo.
Autora: Cristabel Zamora
Coordinadora de Programa Educación para la Paz
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